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CANCUN

RIVIERA MAYA

Las maravillas de Cancún no se reducen a su centro cosmopolita, por el contrario, se encuentran por todos los rincones de esa franja costera de 160 kilómetros de largo, bautizada como Riviera Maya.
De geografía fantástica y naturaleza pródiga, la zona añade a sus inherentes atractivos las magníficas construcciones erigidas en tiempos precolombinos, cuando los mayas reinaban en estas tierras.
En la Riviera Maya -que se extiende hasta la frontera con Belice- se deben visitar los siguientes lugares:

Tulum: los mayas edificaron una hermosa ciudad en la áspera superficie de los acantilados del Caribe. Su obra es sencillamente admirable, tanto, que los primeros españoles que la vieron la compararon con Sevilla y no por nostalgia a la tierra lejana, sino para hacerle mérito a su exultante prestancia.
La ciudad habría comenzado a levantarse en el periodo Clásico, pero su belleza se volvió imperecedera en el Posclásico Tardío (1200 y 1521 d. C.), cuando la ciudad vivió su época de esplendor, por ser un importante eslabón de la cadena comercial marítimo-terrestre de los mayas.
Construida probablemente con fines portuarios, Tulum tenía cinco entradas y dos torres, las cuales, según los estudiosos, son evidencias claras del estricto control ejercido en la ciudad, que en aquellos tiempos era llamada Zamá (amanecer en lengua maya), por ser una atalaya perfecta para apreciar la salida del sol.
El nombre Tulum (muralla) surgió en el siglo XX, en referencia a las grandes paredes que resguardan tres de los lados del centro arqueológico.
Dichas murallas son las más conocidas y mejor conservadas del legado arquitectónico de los mayas.
Dentro de esta zona arqueológica de 6 kilómetros de extensión se deben visitar los siguientes recintos:

El Castillo: resalta por la hermosa fachada de su templo superior. Tiene 12 metros de altura y en su puerta de ingreso sobresalen columnas serpentinas, mascarones zoomorfos y una imagen del dios descendente.

Templo del Dios Descendente: recinto religioso donde se rendía culto a esta divinidad, equivalente al dios azteca Tzontemoc que representaba al sol bajando al atardecer. Se encuentra al norte del Castillo.

Templo de los Frescos: es una de las construcciones más importantes de Tulum. En su interior hay valiosos murales que representan a los seres del “inframundo”. La obra, considerada una de las muestras más brillantes de la pintura mural mesoamericana, evidencia la cosmovisión y creencias de los mayas. Tiene influencias toltecas.
Otros recintos de interés son el Templo al Dios del Viento, la Casa del Cenote, la Casa de las Columnas y el Grupo Kukulkán. También se tiene una excelente vista de las playas que rodean Tulum, las cuales en tiempos prehispánicos recibieron a las naves mayas dedicadas al comercio.
Este importante complejo arqueológico se encuentra a 132 kilómetros al sur de Cancún y a un kilómetro de un centro poblado que cuenta con infraestructura turística.

Reserva de Biosfera de Sian Ka’an: su nombre de origen maya es traducido como “donde nace el cielo” o “regalo del cielo”, quizás por ser un “templo de la naturaleza”, con paisajes pantanosos, selvas tropicales y rincones marítimos en el que se han registrado más de 800 especies de plantas, 339 de aves, 103 de mamíferos y una increíble variedad de insectos (90 especies de abejas nativas, por citar un ejemplo).
Dentro de la reserva puede verse parte de la segunda barrera de arrecifes más larga del mundo. Además, en su bahía existen criaderos de langostas y cayos, los que atraen a miles de aves acuáticas.
Selvas tropicales, bajas e inundables, manglares y dunas costeras, configuran la geografía de Sian Ka’an, que por sus dimensiones (528,148 hectáreas) es una de las tres área naturales más grandes de México, una auténtica explosión de vida silvestre que justifica su denominación de Reserva de Biosfera.
Los viajeros pueden penetrar a este mágico rincón de la naturaleza por dos rutas principales. La primera transcurre entre las lagunas de Boca Paila y Chunyaché, la cual permite apreciar manglares y sabanas, mientras que la segunda lleva a la laguna de San Miguel y la isla de los Pájaros.
También se recomienda visitar Punta Allen, un pequeño poblado localizado en el centro de la reserva, en el que se sorprenderá por la peculiar forma de atrapar las langostas.
Para emprender la aventura es necesario estar en buenas condiciones físicas y contar con la compañía de un guía especializado.
La Reserva de Biosfera Sian Ka’an se encuentra a 140 kilómetros al sur de Cancún y a pocos kilómetros de la ciudad prehispánica de Tulum.

Cobá: es una antigua ciudad maya edificada en medio de lagunas y de un espléndido paraje tropical. Se caracteriza por las numerosas calzadas que parten de ella, las mismas que son conocidas como sacbeob.
Construidas entre los años 600 y 800 d.C., son parte de una extensa red de comunicaciones utilizada no solo con fines comerciales, sino, también, con fines económicos y políticos.
Entre las vías prehispánicas la más importante era la que llegaba a Yaxuná, ciudad localizada en el vecino estado de Yucatán, muy cerca de Chichén Itzá, la principal urbe maya. El camino tiene casi 100 kilómetros de extensión, siendo el de mayor longitud.
Esta importante ciudad, localizada a 47 kilómetros de Tulum, tuvo una población de más de 50,000 habitantes. Los arqueólogos han identificado cerca de 6,000 edificaciones en sus 100 kilómetros cuadrados, por lo que habría sido la más grande de todas las ciudades mayas.
Según las investigaciones, la construcción de Cobá empezó en el periodo Preclásico Tardío (100-250 d.C.). Su apogeo se produjo entre el 800 y los 1000 d.C.
En Cobá, cuyo nombre ha sido traducido como “lugar de agua turbia o picada”, se debe prestar atención a los siguientes grupos arquitectónicos:
Grupo Cobá: está formado por templos, plataformas, basamentos piramidales, plazas y patios. Destaca un gran recinto piramidal de 24 metros de altura, conocido como la iglesia, que en su cúspide tiene un templo con ciertas características toltecas.
Asimismo, alberga edificios palaciegos de grandes dimensiones, lo que evidenciaría la importancia que tuvo la ciudad. De la plaza parten sacbeob (caminos) hacia el norte.
La visita se complementa con el recorrido a la cancha del Juego de la Pelota, que se encuentra al norte de la iglesia. Está decorado con representaciones de cráneos humanos, cautivos y jeroglíficos.

Grupo Nohoch Mul: en esta zona elevada se encuentran los edificios más altos y voluminosos de Cobá. Cuenta, también, con patios, plazas y valiosas piezas artísticas como la Estela 20, la mejor conservada.
Entre sus notables estructuras sobresalen el Nohoch Mul -palabra de origen maya que significa “Gran Montículo”- formado por un gran basamento piramidal de más de 30 metros de altura. Data del periodo clásico temprano (200-600 d.C.) pero, siglos después, se levantó en su cima un templo de 42 metros de altura, considerado el más alto de la civilización maya.
Otro recinto importante es la Gran Plataforma, con 30 metros de altura y 100 x 25 metros en sus lados, es la construcción de mayor volumen en todo el noreste de México. También destaca el Xaibé o crucero de senderos, edificio de base semicircular en el que se encuentran los sacbeob (caminos) 1, 5, 6 y 8.

Grupo Macanxoc: formado por un puñado de plataformas bajas en las que hay pequeños templos y altares circulares. Algunas de estas estructuras son precedidas por estelas esculpidas con inscripciones y representaciones relacionadas con las fiestas cívico-religiosas de los mayas. Un ejemplo admirable es la Estela 1, en cuya superficie se aprecian cuatro fechas que corresponden a los años finales del siglo VIII d.C.
Xcaret: es uno de los parajes más bellos de la costa oriental del estado de Quintana Roo, porque la indescriptible hermosura del mar Caribe se conjuga con la frondosidad de la selva y la monumentalidad de recintos arqueológicos de gran importancia histórica.
Su nombre actual es traducido como “caleta”, aunque se cree que en tiempos precolombinos se le llamada P’ole, término relacionado con tratos comerciales y mercancías, lo que evidenciaría su condición de puerto de gran importancia para la civilización maya. También fue un venerado centro ceremonial.
En la actualidad es un parque temático eco-arqueológico, en el que las valiosas construcciones prehispánicas se complementan con ríos subterráneos, lagunas y albercas naturales. Cuenta adicionalmente con un santuario de aves, mariposario, tortugas y delfines amaestrados.
Se encuentra a 55 kilómetros al sur de Cancún y a 5 kilómetros de Playa del Carmen. Para visitar Xcaret es necesario pagar una cuota de ingreso al parque y otra que permite el acceso a la zona arqueológica.

Laguna Xel-Há: de aguas cristalinas alberga una importante variedad de peces tropicales. Es parte del parque nacional del mismo nombre, el cual está formado por ríos subterráneos, cenotes y sectores de selva apenas investigados.
La laguna, cuyo nombre traducido de la lengua maya significa “Entrada de Agua”, es considerada uno de los acuarios naturales más grandes del mundo, siendo un lugar magnífico para la práctica del snorkel.
Antiguamente esta área natural fue un puerto de escala de los comerciantes mayas, por lo que cumplió un rol primordial en el tráfico marítimo de mercancías y bienes. La presencia prehispánica se evidencia en las murallas, edificios, monumentos (ceremoniales y religiosos) y un sacbeob (camino) de 540 metros de longitud.
En los edificios existen representaciones de aves y felinos, pero también escenas de la vida marítima, elaboradas, posiblemente, en el periodo Clásico Temprano (100-600 d.C.).
La laguna se encuentra a 115 kilómetros de la ciudad de Cancún, en el kilómetro 240 de la carretera Chetumal-Cancún; mientras que la zona arqueológica se halla en el lado oeste de la carretera Federal 180 Puerto Juárez-Chetumal y a 16 kilómetros de Tulum.

-Akumal: es una serena bahía de la Riviera Maya. Su nombre traducido al español significa “lugar de tortugas”, denominación que se explica por la presencia anual de estos longevos y parsimoniosos animales que llegan a desovar en la orilla.
Sus límpidas aguas, sus cenotes y ríos subterráneos, atraen cada vez más viajeros, especialmente aficionados al buceo, el snorkel y el kayac. Se encuentra a 105 kilómetros al sur de Cancún y a 37 kilómetros de Playa del Carmen.

Playa del Carmen: por su paisaje de ensueño y su semblante tropical es uno de los lugares más apetecidos del mar Caribe. Basta con imaginar sus aguas turquesas y su finísima arena, para pensar en el edén; un edén que se ha convertido en uno de los destinos más sofisticados de la Riviera Maya.
Antes del “boom” turístico Playa del Carmen era un modesto pueblo de pescadores. Felizmente, el desarrollo de la zona fue muy bien planificado, lo que ha permitido conservar gran parte de sus rústicos encantos. Se encuentra a menos de 60 kilómetros de Cancún.

Isla de Cozumel: conocida antiguamente como Cuzamil -vocablo maya que significa “Tierra de Golondrina”- es la isla habitada más grande del México. Un lugar exótico bañado por las aguas más transparentes del mundo, con una visibilidad de hasta 70 metros de profundidad. Un mar que desnuda sus profundidades a ojos ávidos de descubrir su variada flora y fauna. Por esta razón, Cozumel es uno de los mejores lugares para la práctica del buceo y el snorkel.
Arrecifes de corales y playas de arena blanca complementan una riqueza paisajística que se torna imponente en áreas naturales como el Chankanaab Park, con 300 especies de plantas oriundas de 22 países y una espléndida laguna con peces multicolores.
En la isla también hay zonas arqueológicas como San Gervasio, la mayor de Cozumel, donde hay templos, urnas y sacbeob (caminos).
Se encuentra a 68 kilómetros al sur de Cancún, frente a Playa del Carmen.

-Chichén Itzá: las espléndidas construcciones de esta urbe prehispánica reflejan la genialidad de los arquitectos mayas, una destreza que a pesar del paso del tiempo sigue maravillando al mundo, como lo reconoció la UNESCO en 1988, al declararla Patrimonio de la Humanidad.
Chichen Itzá es una ciudad de piedra fundada en el año 400 d.C., que entre los años 500 y 900 d.C. se convirtió en el centro religioso más importante de los mayas, llegando a alcanzar una extensión total de 100 kilómetros cuadrados, con un eficiente servicio de agua y una excelente red de caminos pavimentados que la conectaban con el resto de asentamientos prehispánicos.
Este grandioso legado histórico se encuentra a 188 kilómetros de Cancún. (Encontrará mayor información sobre Chichén Itzá en el destino Mérida).

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